miércoles, 13 de abril de 2016

Décima semana de prácticas (11/04/2016)

En esta décima y última semana de prácticas acudo a distintas clases como observadora y tengo la oportunidad de realizar una última clase sobre "micromachismos", a través de la misma metodología utilizada hasta el momento: la dialéctica. 

Termina, pues, mi experiencia en el instituto. Sin duda ha sido gratificante y me ha curtido en muchos aspectos. Destaco la importancia de saber mantener la autoridad ante el alumnado, pero a su vez ser cercano al mismo. Mantener el orden en clase es esencial para que exista respeto y el alumnado pueda expresarse con claridad.

Por otro lado, existe el gran problema de la educación: la desmotivación. Debe ser ésta subsanada y para ello el docente debe tratar de reflejar su propia motivación, interés por cada uno de sus alumnos y formarse constantemente en la acción, para aprender de sus errores e innovar con el fin de captar la atención y el interés del alumnado.   

domingo, 10 de abril de 2016

Novena semana de prácticas (4/04/2016)

En la penúltima semana de prácticas, tuve la oportunidad de impartir clase a los grupos con los que había desarrollado anteriormente la unidad didáctica y a un nuevo grupo de segundo de bachillerato de letras. 

Agradezco la oportunidad de tratar con un nuevo grupo, ampliando mi experiencia con el conocimiento de los distintos cursos.

domingo, 20 de marzo de 2016

Séptima semana de prácticas (14/03/2016)

Finalizada la correspondiente unidad didáctica, dedico la semana a la observación de clases y participación en distintos temarios a través de los debates impartidos por la tutora. 

Debo destacar la corrección y entrega de los exámenes relacionados con la unidad didáctica. Descubro la necesidad de profundizar con los alumnos en una mejor expresión, lo cual debería llevarse a cabo desde muy pequeños y a través de reflexiones de distintos temas. Existe una falta de orden a la hora de exponer las ideas, carencia de cohesión y a veces de coherencia. Sin embargo, descubro el aprendizaje, a nivel general, del temario expuesto y originalidad en muchos escritos. Me siento satisfecha con los resultados. 

Decidí realizar una pequeña anotación en todos los exámenes y entablar por separado con cada uno de ellos una breve conversación sobre el examen y su situación actual que considero que fue del agrado de los alumnos y yo disfruté conociéndolos más personalmente. 

Por último, acudí a las evaluaciones de los grupos a los que evalué personalmente. Resultan muy interesantes ya que observamos el camino en general que lleva el alumno, sus posibles problemas ajenos al ámbito académico o sus limitaciones. 

domingo, 13 de marzo de 2016

Sexta semana de prácticas (7/03/2016)

Dicha semana he finalizado con las clases sobre la UD elaborada sobre bioética. Dimos paso, pues, a la realización de pruebas de evaluación. 

Dividí la evaluación en dos pruebas. La primera constaba de tres debates donde en cada uno se proponía un caso práctico sobre bioética. Así pues, dispuse la clase en dos grupos, avisando con anterioridad a los alumnos sobre a qué grupo pertenecían: al de los que estaban a favor de un determinado caso o al de los que estaban en contra. Dicha primera prueba suponía un 20% de la nota.

La segunda parte de la evaluación se trataba de una reflexión personal sobre otro caso práctico sobre la UD, donde deberían mostrar todo lo aprendido, además de su propia opinión. Por último, esta prueba contaba el 80% restante de la nota.

Aunque desde un primer momento les resultó dificultoso mostrar a favor o en contra de un determinado argumento impuesto, comprendieron la importancia a la hora de construir argumentos y parecieron divertirse. Mi interés recaía esencialmente en la necesidad de saber construir y comprender los argumentos contrarios a una opinión personal. De los cuarenta y seis alumnos en total, sólo un número de cinco alumnos no participó en los debates y sólo dos no se presentaron a la prueba escrita. 

Descubro interés en los alumnos, a los que he llegado a escuchar en el recreo, durante los descansos, debatir sobre temas expuestos en clase. La semana próxima llevaré a cabo un análisis sobre la comprensión del temario reflejado en las notas. 

Por último, acudo a una tutoría de uno de los cursos a los que imparto mi UD, 1ºBAHH, con la profesora de lengua y literatura, debido a que mi tutora no la tutoría de ningún curso. Reconozco de especial interés dicha hora, donde se exponen los problemas de grupo y tratan de resolverse entre todos.

domingo, 6 de marzo de 2016

Quinta semana de práctica (29/02/2016)

Dicha semana es la última que imparto mi unidad didáctica. He ido notando el avance de los alumnos en cuanto a la participación en clase. Los que más hablaban al principio, siguen haciéndolo, mientras que algunos menos participativos se esfuerzan en serlo. La visualización de Gattaca nos permitió una nueva clase de debate, que considero que resultó del agrado de los alumnos. 

Me siento satisfecha por el trabajo realizado, especialmente por el disfrute del alumnado y el mío propio. Me reafirmo en la necesidad de comprender bien el contenido antes de impartir la clase. 

La semana próxima realizarán las tareas evaluables correspondientes a la unidad didáctica. 

domingo, 28 de febrero de 2016

Cuarta semana de prácticas (22/02/2016)

Esta semana he comenzado a impartir las clases correspondiente a mi unidad didáctica sobre bioética. 

Planteadas a través del debate y la participación de los alumnos, veo un claro avance en los mismos. El miedo a la equivocación y la timidez van desapareciendo en la mayoría. Observo cómo se abren a nuevas perspectivas (cambia su primera opinión conforme avanza la clase) e incluso esperan al final de la clase para continuar el debate conmigo. Sin duda, descubro buena actitud por medio de la metodología impartida. Descubro mis defectos, tales como mantener el orden y hacer que respeten el turno de cada uno de ellos. 

A su vez, sigo realizando las clases de 1ºESO. Descubro que con atención, respeto y cariño, los alumnos menos motivados comienzan a dar frutos y a avanzar en sus tareas con más ganas. La psicología es sin duda una parte imprescindible de la enseñanza. 

sábado, 20 de febrero de 2016

Tercera semana de prácticas (15/02/2016)

Tres puntos me parecen esenciales que destacar de dicha semana. En primer lugar, las reflexiones llevadas a cabo tras la reunión con el departamento de orientación psicopedagógica, donde reafirmamos la necesidad de una actitud humana hacia los alumnos. Con ello me refiero a una necesidad de comprenderlos como personas, con sus problemas, sus necesidades, sus dudas; no dedicarnos únicamente a impartir conocimientos. En nuestra mano está mucho más en juego.

En segundo lugar, la importancia de una preparación previa a la hora de impartir un determinado tema. La tutora me ofreció la posibilidad de dar la clase siguiente a la que estaba impartiendo, por lo que el tiempo que preparación que poseí fue más bien escaso. Sin duda noté el cambio de la no preparación a la preparación previa, por lo que confirmo la importancia de esta última.

Y en tercer lugar, el análisis realizado a los alumnos disruptivos que tuve la posibilidad de supervisar y la suerte de poder ver su avance en las semanas que llevo en el centro.Las primeras semanas, el alumnado se presentaba reacio al cambio, sin embargo, esta semana encuentro motivación en la lectura (que acaba de abrírsele) en uno de ellos. Alejados del grupo, muestran actitudes completamente distintas. Sin embargo, considero que no es la mejor opción para que el alumno interiorice su error; más valdría distintas reuniones con el alumno en cuestión o el grupo de alumnos para tratar temas de una mejor integración.

domingo, 14 de febrero de 2016

Segunda semana de prácticas (8/02/2015)

En dicha segunda semana de prácticas, además de realizar la observación de la metodología de mi tutora en sus clases impartidas, llevé a cabo mis tres primeras clases con los dos grupos de primero de bachillerato (el BACC y el BAHH). 

Aunque no se trataba de la UD que tengo asignada, impartí las clases sobre el concepto de belleza a lo largo de la historia con ayuda previa del libro de texto y la tutora. Ésta última no acudió a mis explicaciones debido a motivos personales, por lo que me enfrenté sola al reto. Sin duda fue muy gratificante, utilizando una metodología de participación del alumnado, que se mostró comprensivo y participativo en general. Comienzo a cerciorarme de los distintos grupos de amigos y de las distintas actitudes de los alumnos (timidez, valentía, indiferencia, etc.). 

A su vez, observé la evaluación de ciertos exámenes por parte de mi tutora y supervisé sin la tutora la realización del examen de Descartes por 2ºBAHH. Además se me explicó la organización del departamento de filosofía, sencilla y correcta al ser únicamente partícipes dos miembros. 

viernes, 5 de febrero de 2016

Primera semana de prácticas (2/02/2016)

El día 2 de febrero comenzaron las prácticas correspondientes al Máster de Profesorado de la Universidad Miguel Hernández. El coordinador José Monllor, a su vez profesor de historia del centro que se me ha asignado (al que pertenecí hace años) IES La Torreta, llevó a cabo la presentación de las actividades que debemos realizar el alumnado en prácticas, además de algunos puntos necesarios sobre el conocimiento del centro y sus representantes. Tras la correspondiente reunión hicimos la primera toma de contacto con nuestros tutores y conocimos la organización del centro y a gran parte de su personal.

A raíz de la observación de las clases de mi tutora, me reafirmo en la metodología que pretendo llevar a cabo, es decir, un ambiente de participación y reflexión. Aproveché el tiempo de observación para cerciorarme de la disposición de la clase y la actitud de los alumnos de bachillerato y 3ºESO. A su vez, tuve la oportunidad de realizar distintas guardias en la biblioteca y en la sala de guardias con algunos alumnos disruptivos que mostraron un buen comportamiento en solitario. Allí acordamos y comenzamos con la UD que realizaré a partir de la semana del 22 de febrero con los dos primeros de bachillerato, en relación con la obra de Michael Sandel, Contra la perfección.


Se me brindó la oportunidad de participar en la supervisión de los alumnos de 1ºESO que no habían asistido a la visita al museo, con los cuales mantuvimos un relación cercana y psicológica, conociendo a fondo a quienes no se sienten realmente motivados para el estudio. 

Finalmente, los alumnos de prácticas asistimos a una de las reuniones de programadas para este mes de la COCOPE (Comisión de Coordinación Pedagógica). Allí se trataron especialmente cuestiones sobre la mejora de la convivencia del centro y la necesidad cooperativa de los docentes. Me pareció adecuada, donde se tratados unos temas esenciales y necesarios, aunque percibí poca participación por algunos docentes. 

sábado, 9 de enero de 2016

Definición de conceptos

Esta entrada la dedicaré a definir ciertos conceptos clave en la filosofía de Simone de Beauvoir. 
  • Eterno femenino 
Rol de la mujer a través de la historia. Estado de la mujer como subordinada al hombre y oprimida, debido a una cultura que le impone constantemente su condición y no le permite realizarse como sujeto o crear su propia identidad. 
  • Alteridad 
La palabra alteridad proviene de la palabra latina alter, que significa "otro". Así pues, tiene relación con otro concepto clave de Simone de Beauvoir: "lo Otro". La alteridad es un concepto contrario a la identidad. 

Se trata de una categoría que sirve para indicar que las mujeres están oprimidas y subordinadas por el hombre.

El hombre lucha constantemente por reafirmarse como sujeto y para ello se delimita negando "lo Otro", que es la mujer, cosificándola, negando su identidad como sujeto. 
  • Dialéctica hegeliana del amo y del esclavo
Se trata del modo en que piensa Hegel que comienza la historia del ser humano; el origen de las relaciones sociales. 

"Dialéctica" significa técnica de dialogar y discutir para descubrir la verdad mediante una serie de argumentaciones contrarias entre sí. 

El hombre es autoconciencia, consciente de su realidad y de su dignidad humana. En este caso, dos autoconciencias se plantean el origen de la historia. Se enfrentan dos deseos; el deseo humano desea el deseo del otro, ser reconocido por el otro.

Hegel parte de la noción de deseo, que presupone una carencia, un vacío que debe llenarse y, por tanto,  un impulso hacia lo "otro", donde el primero del que hablamos logrará su satisfacción, su identidad, su reafirmación, pasando el segundo a ser acción que satisface el deseo, haciéndolo por negación, transformándose en objeto deseado; se cosifica (se convierte en una mera cosa). 

Se habla, pues, de una lucha a muerte por el reconocimiento de la primera autoconciencia. Esto supone que cada autoconciencia que lucha a muerte debe estar dispuesta a renunciar a la vida, debe tener miedo al otro, corriendo el riesgo de perder su existencia individual. 

Simone de Beauvoir lleva esta dialéctica al hombre (como amo) y a la mujer (como esclava). 
  • Trascendencia
Se une al concepto de "proyecto de vida" de Simone de Beauvoir. 

Se refiere a la posibilidad de atravesar límites, romper fronteras. Es algo que está más allá del medio natural, alcanzar algo que está más allá de los límites del cuerpo y, en este caso, tiene que ver con la propia existencia del individuo.

Concepto opuesto a la inmanencia. 

  • Inmanencia
Proviene del latín "immanens", "im" (hacia dentro) y "manere" (quedarse, permanecer). 

Es el estado en el que se encuentra la mujer al no poseer un proyecto de vida, al no trascender. Es decir, es pura esencia, y no trascendencia. Es estancamiento. 

Concepto opuesto a la trascendencia.
  • Libertad
Condición de todo ser humano, tanto hombre como mujer. 

La libertad se ve condicionada por la situación que envuelve a cada individuo y por su capacidad para sumirla, pero es intrínseca en cada uno. 

Ser libre es un requisito moral que todos debemos aceptar y llevar a cabo, no es simple sencillez. 
  • Responsabilidad
Concepto relacionado con la libertad. Es la acción que responde a la misma. Asumir la libertad supone asumir la responsabilidad, que supone la pérdida de ciertas comodidades y es un duro paso para asumir por completo la libertad. Tener responsabilidad es un requisito moral para llevar a cabo las propias elecciones que llevarán a la libertad.
  • Situación
La situación es el marco en el que se puede ejercer la libertad, que la facilita o la dificulta. La situación es el afuera. El concepto situado (concepto constante en la filosofía de Simone de Beauvoir), hace referencia al sujeto que vive inmerso en una serie de circunstancias o situaciones que limitan su libertad. 
  • Método regresivo-progresivo
Método de carácter heurístico (para resolver problemas). 

La primera parte tiende al análisis para encontrar las causas de un determinado problema, en este caso, el de la mujer. Se centra en la búsqueda de las causas que han provocado la situación de alteridad en la mujer; busca el origen del problema. Podemos observar esta parte del método en el primero volumen de la obra El Segundo Sexo. Se trata de una fase analítica. 

En cuando a la segunda parte, se parte de las causas encontradas para probar su coherencia con los efectos que hemos supuesto que produce. Esta segunda parte la podemos encontrar en el segundo volumen de El Segundo Sexo. Se trata de una fase sintética. Ya no es regresiva porque se plantean los problemas del presente, no los del pasado.
  • Cosificación
Conversión de las personas en cosas, en este caso por parte de los hombres y la sociedad a la mujer. 

  • Feminismo 
Doctrina o movimiento social que reclama el reconocimiento de capacidades y derechos de la mujer que han sido constantemente propiedad únicamente del hombre. 

Cómo hacer una redacción en filosofía

Similar a la anterior entrada, ésta voy a dedicarla a daros consejos para realizar una redacción de filosofía. 

Ésta es quizás la parte más complicada del examen o la que más miedo nos da. En la redacción tenemos que mostrar todos nuestros conocimientos sobre el filósofo en cuestión de manera cohesionada y coherente. 

Es muy importante que leamos con atención la propuesta que se nos presenta. Leída ésta, os recomiendo que hagáis un pequeño esquema de los conceptos que creéis que debéis exponer.  Los conceptos deben de estar ligados. Los distintos párrafos tienen que tener relación entre ellos, si no lo tienen, no mostraréis una parte esencial a la hora de puntuar, que es saber organizar y asociar los conceptos. 

Como sabemos, una redacción consta de tres partes: 
  1. Introducción 
  2. Desarrollo
  3. Conclusión 
En cuanto a la introducción, se trata de un párrafo breve donde se presenta el problema filosófico y, obviamente, el filósofo a tratar y su contextualización.

En el desarrollo debemos exponer el tema. El desarrollo es la parte más compleja. En ella tenemos que demostrar que dominamos toda la filosofía de Simone de Beauvoir pero sin salirnos en ningún momento del tema que nos piden que desarrollemos, por lo que habrá conceptos que no tendremos que describir en profundidad. Recurrir al tema propuesto siempre que veamos oportunidad para mostrar que sabemos ligar los todos los conceptos.

Expuesto el contenido, es necesario que hablemos brevemente sobre la filósofa, la corriente filosófica a la que pertenece y a su contexto. Es muy importante que situéis al filósofo en su contexto y si sabemos los precedentes del problema, las causas y sus consecuencias, ¡mucho mejor! Así demostraremos nuestro interés y cómo comprendemos el tema expuesto no sólo en el filósofo, sino en su propia historia. 

Utiliza constantemente los conectores argumentativos para enlazar los párrafos con otros para así mostrar qué relación hay entre ellos y cómo se encadenan. Se seguimos un orden correcto, la conclusión será muy sencilla de expresar.

Finalmente, la conclusión es un resumen del tema principal que hemos desarrollado. Os recomiendo que pongáis todo vuestro entusiasmo en esta parte. Cuanto más original sea, más puntuación obtendréis (recordad que leemos cientas de redacciones de un mismo tema, y los correctores ¡miles!). Debéis aclarar la cuestión propuesta. Podéis añadir también una sutil opinión personal, por ejemplo, con frases como "en mi opinión", "considero que", etc., pero no olvidéis ser formales en este punto (la informalidad pierde muchos puntos en los exámenes de selectividad).

Lo más importante a la hora de hacer una redacción ordenada, coherente, cohesionada y, a poder ser, original. Por otra parte, es esencial que no nos salgamos del tema. Si comenzamos a darle más importancia a otros conceptos u olvidamos cual es el tema principal, la redacción no contará tanto.

Una recomendación personal es poner sentimiento, pero sin pasarse de sentimentalismo. Recordad que no estamos escribiendo una novela ni una redacción de nuestras vacaciones. Se trata de un texto que debe ser objetivo desde un principio, pero dejando entrever, al menos en la conclusión, vuestra opinión. 

¡Recordad la ortografía! Sabéis que somos muy estrictos con este tema, sea la asignatura que sea. Os recomiendo leer mucho para mejorar este aspecto. Si lo hacéis, ni siquiera dudáis de si una palabra se escribe o no sin "h" o si lleva acento o no.




Espero que os haya servido este entrada y os haya aclarado algunas dudas. Igualmente, en los comentarios podéis preguntar lo que queráis y podéis mandarme vuestras redacciones a mi email (laura.caparros@goumh.umh.es)  para que les eche un ojo.

¡Ánimo! Juntos superaremos el miedo al folio en blanco.

Cómo realizar un comentario de texto

Esta entrada la he querido dedicar a daros  una serie de consejos para ayudaros a la hora de realizarlo vosotros. Os voy a subrayar en el texto los aspectos más importantes.
Bien, dicho esto, aquí os dejo el texto que utilizaremos como guía (posible en los exámenes de selectividad):

“Ahora bien, lo que define de una manera singular la situación de la mujer es que, siendo una libertad autónoma, como todo ser humano, se descubre y se elige en un mundo donde los hombres le imponen que se asuma como el Otro; pretenden fijarla como objeto y consagrarla a la inmanencia, puesto que su trascendencia será perpetuamente trascendida por una conciencia esencial y soberana. El drama de la mujer es ese conflicto entre la reivindicación fundamental de todo sujeto, que se plantea siempre como lo esencial, y las exigencias de una situación que la constituye como in-esencial. ¿Cómo puede cumplirse un ser humano en la condición femenina? ¿qué caminos le están abiertos? ¿Cuáles conducen a callejones sin salida? ¿Cómo encontrar la independencia en el seno de la dependencia? ¿Qué circunstancia limitan la libertad de la mujer? ¿Pueden ellas superarlas? Éstas son cuestiones fundamentales que quisiéramos aclarar. Es decir que, puesto que nos interesamos en las oportunidades del individuo, no definiremos esas oportunidades en términos de felicidad, sino en términos de libertad.Es evidente que este problema no tendría ningún sentido si supusiéramos que pesa sobre la mujer un destino fisiológico, psicológico o económico.”
Simone de Beauvoir. El segundo sexo. Introducción

El folio blanco (y os lo digo por experiencia) da miedo. Cuando leemos un texto del que tenemos que realizar un análisis, nos bloqueamos, observamos demasiados datos, caos. Nos cuesta crear una organización coherente y estructurada en nuestra cabeza.
No tenemos que dedicarnos a copiar ni tampoco a explicar en profundidad los conceptos. Tenemos que leer, comprender y subrayar.
Primero debéis leer una primera vez el texto, para situaros (este es el momento más difícil, porque tendemos a leer con rapidez). Ahora lo leeréis una segunda vez, para centraros. En esta segunda vez deberíais subrayar conceptos que os llamen la atención y creáis que son necesarios para la creación de vuestra síntesis. Y, por último, debéis leerlo una tercera vez para apuntar lo que se os haya pasado en la vez anterior. Sin embargo, yo recomiendo que leáis el texto las veces que sean necesarias y que escrito vuestro resumen, volváis a leerlo y a reafirmar vuestras ideas comparándolo con el texto expuesto.
Es importante que subrayéis los conceptos clave (el Otro [línea 3], inmanencia [línea 4], trascendencia [línea 5], etc.). De esta manera no nos pondremos tan nerviosos y no veremos el texto como si estuviera escrito en árabe. Descubriremos que entendemos todos los conceptos y que somos capaces de enfrentarnos a ellos.
Hecha ya la lectura del texto, en primer lugar, hemos de sacar la idea principal del texto (recordad que siempre podemos apoyarnos en algunas frases y copiarlas para confirmar nuestros argumentos). Podemos resumir la idea principal en una breve frase o incluso en una palabra, lo que sería el tema del texto.
Acto seguido hacemos un breve resumen del texto donde, sin duda, incluiremos las ideas secundarias del texto.
Tras la lectura del texto, desde mi punto de vista la idea principal sería el concepto clave del que hemos hablado: la situación. A raíz de la situación, podemos encontrar otra serie de conceptos como el de “lo Otro”, la “inmanencia”, “la trascendencia” o “la libertad”, que se mueven en torno a este concepto principal.
Hemos de tratar de asociar todos los conceptos, no comprenderlos como puntos separados o no cohesionados entre sí. Si no llevamos a cabo este punto, nos encontraremos con un texto desordenado, donde la persona que corrija verá que sabéis los conceptos pero de manera aislada y que no habéis comprendido el texto.
Es por ello por lo que debemos utilizar frases cohesionadas entre sí, sin perder el hilo del texto y sin salirnos de él. No nos piden que hagamos una redacción (para eso tenemos otro punto donde se nos pide muy claramente), nos piden que resumamos el texto.
Quizás no os parece relevante esta entrada, que llevamos mucho tiempo haciendo resúmenes, pero existe la tendencia a plasmar los conocimientos en lugar de plasmar el contenido de los propios textos. Es por ello que me parecía necesario y de una gran ayuda (¡yo también me perdía en vuestro curso!) para vosotros. Además, sé de la posible dificultad de enfrentarse a un texto filosófico, donde se muestran tantos conceptos estudiados  y una complejidad algo alta del lenguaje. Pero si seguís todos estos pasos en cada uno de los textos que realicemos, no habrá problemas, y si los hay, no dudéis en escribirme o concretar una tutoría conmigo para que aclaremos la mejor manera de realizar comentarios de texto.


TAREA
Y ya que os he dado una serie de consejos para realizar un comentario de texto, en esta entrada os voy a pedir que hagáis una breve síntesis del texto apuntado el tema principal y las ideas secundarias con la ayuda que os he aportado. De 5 a 10 líneas. Cuanto más breves seáis, más supondrá vuestra comprensión del tema.


Esforzaos, no os agobies, no tengáis miedo a equivocaros. El error es siempre el mejor ayudante. ¡Ánimo! 

viernes, 8 de enero de 2016

El origen del problema

Antes de comenzar, he encontrado un vídeo precioso en un blog sobre la evolución de la mujer que me gustaría compartir con vosotros:



Estoy segura de que algunas imágenes más que otras os han hecho pensar sobre la subordinación de la mujer, de la que tanto hemos hablado, pero...

¿Cuál es el origen de la situación de subordinación de la mujer?

Simone de Beauvoir parte de la idea de que la mujer es como es debido a la carga cultural que posee, como hemos ido viendo hasta ahora. Hablamos, pues, de un proceso histórico. La autora bebe del materialismo histórico, corriente filosófica que estudia las leyes que explican el desarrollo de las sociedades. Ella misma afirma en su obra "La teoría del materialismo histórico ha sacado a la luz verdades importantísimas" (capítulo III de El Segundo Sexo). 

¿Por qué es tan importante esta corriente para Simone de Beauvoir? Dicen así las siguientes líneas a la expuesta anteriormente: 
"La Humanidad no es una especie animal: es una realidad histórica. La sociedad humana es una antífisis: no sufre pasivamente la presencia de la Naturaleza, la toma por su cuenta".

De este modo, la mujer no está definida únicamente por su sexualidad y su carácter biológica, sino por una estructura cultural impuesta en cualquier cultura a lo largo de la historia. Y, aclarada esta idea, Simone de Beauvoir comienza la parte regresiva del método regresivo-progresivo para analizar la evolución del rol impuesto e interiorizado de la mujer. 

Comienza con la Edad de Piedra, en la que descubre una clara igualdad entre hombres y mujeres, pues, aunque el hombre se dedica a la caza y a la pesca, las fuerzas de la mujer se adecuaban a los trabajos en el huerto o del hogar, por lo que ambos realizaban trabajos productivos. El hogar era a su vez un lugar de producción y trabajo, por lo que se igualaban los roles. Sin embargo, cuando se descubre el cobre, el estaño, el bronce y el hierro, el hombre recurre a esclavizar a otros hombres para una mayor y más fácil producción (recordamos llegados a este punto la teoría hegeliana del amo y el esclavo). Poco faltaría para que la mujer pasara a ser, como la tierra y el esclavo, pertenencia del hombre. La producción exterior convertía al hogar en un lugar poco productivo, un "accesorio insignificante". 

Con la creación de esta figura masculina, el derecho paterno acaba sustituyendo al de la mujer, ya que el hijo hereda el dominio del padre, no de la madre. Así nace la sociedad patriarcal cuyas bases se sitúan en la propiedad privada. El hombre ha creado su imperio, en el que la mujer es la opresora y sierva del hombre. 

Es pues en la Edad de Bronce donde el problema de la dominación del hombre sobre la mujer comienza a atisbarse. El hombre, capaz de hacer frente a la naturaleza con sus útiles, ya no lo teme; es capaz de conquistarla. Pero el hombre no se conforma con mejorar sus huertos, sino con expandirse.

Éste es el origen del problema. Un problema que, como vemos, es muy antiguo. Nos puede dar vértigo la escena. La mujer, subordinada desde los principios de los tiempos. Cuando finaliza el análisis de la Edad de Bronce, Simone de Beauvoir continúa analizando el avance de la historia y por tanto la opresión de la mujer, hasta llegar a su época. 

El método regresivo-progresivo, en este caso esa primera parte de la metodología, nos permite llegar a las verdaderas causas del problema actual. La regresión supone una vuelta al pasado, hasta el punto principal de la cuestión.
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Se considera a las mujeres como las grandes olvidadas de la historia. Os dejo una curiosa entrada sobre "La mujer a través de la historia" en un blog muy interesante. 

Me gustaría que observáramos un vídeo sobre el avance de la mujer, del que responderemos las preguntas asignadas para esta tarea. Aquí os lo adjunto:

"El rol de la mujer a través de la historia".  



Tras la visualización del vídeo, me gustaría que respondiéramos a las siguientes preguntas:

¿Qué opináis sobre el vídeo adjunto? ¿Qué papel creéis que ha tenido la mujer a lo largo de su vida? ¿Qué mujeres importantes conocéis? ¿Crees que es fiel a la realidad? 

¿Es el ser humano libre?

¿Es el ser humano libre para Simone de Beauvoir?

Hace poco leí un artículo cuyo título me pareció elogiable. Decía así: "Simone de Beauvoir, la filósofa que liberó a las mujeres... y a los hombres" (podéis acceder a él clicando sobre el título entrecomillado). 

Se conoce a Simone de Beauvoir especialmente por su aportación al feminismo (un feminismo existencialista, no lo olvidemos), pero olvidamos que nos encontramos ante la igualdad, y para que la igualdad tenga sentido, no es sólo la mujer la que debe independizarse y encontrar su identidad, sino también el hombre. 

En la entrada anterior hablábamos del eterno femenino, aquel el rol impuesto por la cultura a la mujer a través de los tiempos. Finalizaba la entrada haciendo un pequeño apunte: la dificultad de romper las barreras de la cultura y aceptar la propia libertad para elegir. 

Comenzaba ahora mismo con la cuestión de la libertad para Simone de Beauvoir y, por si no os habéis cerciorado, he preguntado sobre el ser humano, y no sobre la mujer. Por fin os respondo: sí, el ser humano es libre para Simone de Beauvoir. ¿Cuál es el problema entonces? El problema es que el ser humano no quiere asumir su libertad. 

Vayamos por partes. Puede parecer extraño que ahora dudemos de la libertad del hombre (como varón), si él es el dueño en la sociedad patriarcal, el que se define delimitando al otro, que es la mujer. Esto nos lleva inevitablemente a hablar sobre la teoría hegeliana del amo y del esclavo. Pensemos por un momento, ¿qué sería del amo sin el esclavo? ¿Sería acaso amo? ¿Estaría jerárquicamente por encima de alguien? El ser humano necesita crearse como sujeto delimitándose con la creación de lo "otro". El amo es sólo amo si posee a alguien que le sirva, es por ello por lo que busca reafirmarse como sujeto en oposición a los demás. Claro, si el ser humano es libre (si lo otro ya no es lo otro, sino que es sujeto), ¿qué sentido tiene el amo? 

Ahora extrapolemos esta situación de esclavitud al hombre y la mujer, comprendiendo al hombre como amo y a la mujer como esclavo. La situación de subordinación a lo largo de la historia es la misma. Pero seguimos sin comprender la dificultad de aceptar la libertad, ¿qué problema existe? 

Cuando la mujer, o el esclavo, se cercioran de su situación y de su posibilidad de ser libres, no se obtiene tan fácilmente el resultado que esperamos. Supongo que la mayoría pensaríamos que el esclavo (o la mujer) tenderá a rebelarse para conseguir sus derechos y definirse en su libertad. ¿Por qué estamos tan seguro de ello? Quizás porque hasta el momento hemos visto a lo largo de la historia cómo la esclavitud ha ido desapareciendo y la mujer ha ido emancipándose (manifestaciones feministas, cartas de derechos humanos, etc.). De manera externa, todo ser humano ha luchado constantemente por sus derechos: los esclavos querían tener los privilegios del amo y las mujeres los mismos derechos de los hombres. Si embargo, ¿por qué sigue existiendo machismo en nuestros días, entonces? 

El problema de la libertad es que, asumirla, trae consigue un concepto clave y, sin duda, duro: la responsabilidad. Cuando uno asume su libertad, significa que es capaz de tomar sus propias elecciones. No depende de nadie. Quizás ahora empecéis a atisbar el problema. ¿Acaso no es difícil no depender de nadie? Pensemos en nuestras familias, en el momento en que hemos de abandonar el nido. Dejar de depender de los padres significa perder muchas comodidades, tales como no tener la comida hecha, la casa ordenada o dinero para nuestros caprichos, además de la unión sentimental que nos une y duele cuando te alejas. Ahora, pensemos en el esclavo: si el esclavo se rebela contra su amo, significa que no tendrá una casa fija o un plato de comida caliente a lo largo de su vida. Ahora, la mujer. Si la mujer asume su libertad, deberá llevar a cabo tareas que hasta el momento eran del hombre, como por ejemplo, y muy actual, llevar al coche al mecánico, llevar las cuentas de la casa o incluso ser una pieza imprescindible en llevar dinero la hogar. Son sólo unos ejemplos, pero existen mucho más. ¿Y el amo? El amo no obtendría del esclavo su servidumbre, no tendría el desayuno hecho todas las mañanas o debería trabajar para ganarse el pan. Y, finalmente, el hombre, que debería de igual manera asumir que debe limpiar él mismo, que no llegaría a casa con la comida hecha.  

Nos encontramos, por tanto, con seres humanos iguales que no aceptan su libertad porque hacerlo supondría perder la comodidad que supone no poseerla. ¡Nos encontramos con que ser libres es duro! ¡Pero si hemos luchado constantemente por nuestros derechos! Claro, claro que sí, lo hemos hecho... ¿Pero hemos luchado por la verdadera igualdad? ¿Por la igualdad jurídica, pero también la personal? ¿O sólo hemos luchado por la igualdad que nos convenía? Porque es tan fácil que nos den ciertas cosas hechas... 

Estoy segura de que ahora todos nos hemos dado cuenta de que hay muchas responsabilidades que nos cuestan asumir. Por ello (y sin duda me incluyo), me gustaría que reflexionáramos sobre la libertad que creemos poseer. Porque la cultura pesa y es deshacerse de costumbres incorrectas, pero también pesa romper con la comodidad e independizarse; también cuesta dar el paso para ser. 



TAREA

Como tarea, tras la lectura de la entrada, me gustaría que concretarais más ejemplo que pueden impedir que el esclavo o la mujer no asuma su responsabilidad (como los que he puesto sobre llevar las cuentas, el mecánico, etc.).



Espero que os haya ayudado a comprender a Simone de Beauvoir, pero también a nuestra sociedad y  a nosotros mismos. Os confieso que esta teoría, a mí me cambió la vida.

¿Qué es el "eterno femenino"?

Comenzaremos esta entrada con un texto esencial de Simone de Beauvoir, escrito en su obra El Segundo Sexo: esencial de Simone de Beauvoir, escrito en su obra El Segundo Sexo: 


"No se nace mujer, se llega a serlo". Recordemos esta frase. Es sin duda la más conocida de la filósofa porque resumen la mayor parte de su obra en tan pocas palabras. ¿Qué quiere decir con ella? Si la comprendemos literalmente, no tiene sentido, ¿verdad? Claro que se nace mujer, al fin y al cabo, nos podemos diferenciar de los hombres fácilmente. 

Pero, ¿en qué nos diferenciamos de los hombres? Creo que lo primero que nos vendrá a la cabeza serán nuestras diferencias físicas. "Yo tengo pechos, el hombre no los tiene". Sin duda. Biológicamente hablando no cabe duda que tantos las mujeres como los otros poseen rasgos que los definen como sexo. Pero Simone de Beauvoir iba mucho más allá. 

Aunque las mujeres nacen físicamente como mujeres, no nacen como mujeres personalmente hablando. No existen unas cualidades fijas que definan a la mujer como género. Es posible que existan ciertas tendencias debido a la genética, pero nada lo suficientemente importante como para alejarlas tan radicalmente de la personalidad del hombre. Por tanto, ¡no se nace mujer! Pero, ¿por qué Simone de Beauvoir escribió esta frase? 

Simone de Beauvoir escribió esta sentencia porque, culturalmente, la mujer sí parecía haber nacido como "mujer". Pero, como mujer de aquella época. La mujer sentía tal como sentía, pensaba tal como pensaba y actuaba tal como actuaba porque desde muy pequeña la cultura en la que se veía inmersa le había dicho: sé así. Ni siquiera se le había obligado a serlo, directamente formaba parte de la normalidad. Se le había inculcado su rol. Esto es lo que llamamos el "eterno femenino". Este concepto, esencial en la obra de la autora, responde a la condición que ha poseído la mujer a lo largo de la historia y que, sin duda, ha asumido. 

"Se llega a ser"; se llega a ser mujer. Confirmamos pues, según la autora, que no se nace con un "rol de mujer", sino con una cultura patriarcal que te lo impone. Pero Simone de Beauvoir no pierde la fe. Ya que no se nace mujer, ya que sólo es cultura, la mujer tiene la posibilidad, el derecho, la libertad, de llegar a serlo. Con llegar a serlo nos referimos a formar su propia identidad, a deshacerse del peso de las costumbres, los prejuicios y los estereotipos. La mujer es libre, como todo ser humano, y es dueña de sus propias elecciones, lo que le permite formarse como individuo, ya no como un "otro" distinto al hombre, sino como propio sujeto. 

El concepto de eterno femenino posee cabida en nuestra actualidad. Aunque hemos avanzado hacia la igualdad, todavía siguen habiendo resquicios de eternos femeninos, de mujeres que interiorizan el papel que su cultura les ha inculcado. Hay muchos ejemplos que quizás observamos con más claridad en nuestras abuelas, uno de ellos es la afirmación de que la mujer "debe" cocinar para el marido, "debe" cuidar de los niños o "debe" limpiar la casa. ¿Qué nos responden ellas cuando les preguntamos "por qué"? "Porque es así, porque siempre ha sido así". Es importante que comprendamos el concepto y la necesidad de interiorizar en la frase analizada por Simone de Beauvoir: "No se nace mujer, se llega a serlo", para que rompamos con las barreras culturales y de una vez por fin, seamos, simplemente seamos; que podamos caernos, errar, levantarnos y mejorar, que tengamos libertad para ello. Pero, para ello, debemos asimilar que somos libres, que no somos una mera imagen creada. Como veremos en la siguientes entradas, esto no es tan sencillo como parece.

Quería acabar este punto con un precioso poema de Víctor Hugo que se titula "El hombre y la mujer": 

El hombre es la más elevada de las criaturas.
La mujer es el más sublime de los ideales. 
Dios hizo para el hombre un trono; para la mujer un altar.
El trono exalta; el altar santifica.
El hombre es el cerebro.
La mujer el corazón.
El cerebro fabrica la Luz; el corazón produce el Amor.
La Luz fecunda; el Amor resucita.
El hombre es fuerte por la razón.
La mujer es invencible por las lágrimas.
La razón convence; las lágrimas conmueven. 
El hombre es capaz de todos los heroísmos.
La mujer de todos los martirios.
El heroísmo ennoblece; el martirio sublimiza.
El hombre tiene la supremacía.
La mujer la preferencia.
La supremacía significa la fuerza; la preferencia representa el derecho.
El hombre es un genio.
La mujer un ángel.
El genio es inmensurable; el ángel indefinible.
La aspiración del hombre es la suprema gloria.
La aspiración de la mujer es la virtud extrema.
La gloria hace todo lo grande; la virtud hace todo lo divino.
El hombre es un código.
La mujer un evangelio.
El código corrige; el evangelio perfecciona. 
El hombre piensa.
La mujer sueña.
Pensar es tener en el cráneo una larva; soñar es tener en la frente una aureola.
El hombre es un océano.
La mujer es un lago.
El océano tiene la perla que adorna; el lago la poesía que deslumbra.
El hombre es el águila que vuela.
La mujer es el ruiseñor que canta.
Volar es dominar el espacio. Cantar es conquistar el alma.
El hombre es un Templo.
La mujer es el Sagrario.
Ante el Templo nos descubrimos; ante el Sagrario nos arrodillamos.
En fin: el hombre está colocado donde termina la tierra.
La mujer donde comienza el cielo.

¿Simone de Beuavoir o Sartre?


Cuando hablamos de feminismo en Simone de Beauvoir, hablamos de un feminismo existencialista. Como ya sabemos, la autora forma parte de la corriente del existencialismo, incluso ella misma confirma que El Segundo Sexo está planteado desde un punto de vista existencialista.

¿Cómo nos cercioramos de la aparición de dicha corriente? En la afirmación de la libertad como condición básica del ser humano, la forja del destino por parte de uno mismo y sus elecciones, la importancia de la experiencia personal, entre otros aspectos que se crean como marco de toda la obra. 


Un exponente esencial en dicha corriente en Jean-Paul Sartre, quien mantuvo no sólo una relación intelectual con nuestra filósofa, sino amorosa. Muchos autores defienden la gran influencia del filósofo en la obra y filosofía de Simone de Beauvoir, e incluso algunos opinan queEl Segundo Sexo es sólo una explicación de las tesis de Sartre pero llevadas al plano de la mujer. 

Me gustaría dedicar la entrada al análisis de las tantas críticas que defienden que Simone de Beauvoir sólo plasmó la filosofía de Sartre.

Partimos de la base de que Simone de Beauvoir es una filósofa existencialista. Es bien sabida su relación con Sartre. Ambos mantuvieron una relación intelectual y amorosa. Aunque ambos tenían a la poligamia, el amor que se profesaban era de admirar. Existen muchas cartas que demuestran su cariño, su sinceridad y su amor, más allá de las relaciones que mantuvieran con otras muchas personas. Por ello, es clara la influencia de Sartre en el pensamiento de Simone de Beauvoir, pero, ¿qué problema existe?

La autora bebió de la filosofía de Sartre, de sus ideas sobre la libertad y la responsabilidad, entre otras tantas. Claro, es cierto. Pero fue ella, mujer, quien a raíz de su condición de género, supo transmitir no sólo las ideas de Sartre, que ella había interiorizado y desarrollado, sino sus sentimientos, su manera de ver el mundo y su contexto. Aquí os adjunto un vídeo de Simone de Beauvoir hablando de cómo se conocieron y sus primeras impresiones:


Ambos dos eran personas curiosas. Eran independientes, revolucionarios, solitarios. Lo tenían todo para amarse, pero también para no formar una pareja que hoy entendemos por normal, porque ninguno de los dos lo era.

Sin duda, la relación de ambos causó estupor en la sociedad, pero, pensemos en cuál de los dos artistas fue más rechazado socialmente. Hasta el momento, al hombre se le ha permitido la poligamia. Sin embargo, la mujer (especialmente en aquello época) lo tenía prohibido; una mujer de muchos hombres, sabemos todo de qué era tachada.

Por tanto, Simone de Beauvoir se enfrentó a la sociedad y se liberó. Tomó sus propias elecciones, fue valiente, fuerte y libre. Incluso llegó a mantener relaciones con mujeres. ¿Quita fuerza en su filosofía estos planteamientos? Considero que es al revés. Una mujer de aquella época, que es capaz de enfrentarse a su cultura, al eterno femenino, al qué dirán, me parece que no puede exponer una mera copia de la filosofía de otro. Sartre no vivió lo que vivió Simone. Sartre conoció sus circunstancias, pero no las de ella. Son sujetos situados distintos.

Por otro lado, no hemos negado en ningún momento la influencia del filósofo en Simone de Beauvoir y, como hemos dicho, hay teorías que hablan del desarrollo de las tesis del primero por parte de ella pero llevado al ámbito de la mujer. Desde mi punto de vista, es cierto. Es cierto en tanto que ambos eran existencialistas y que ella tenía un pensamiento muy similar al de él, pero no hemos de olvidar, como he dicho anteriormente, que él no era mujer.

Es un tema para reflexionar. ¿Por qué es tan importante la originalidad? La importancia moral del existencialismo es tal que no deberíamos darle tanta importancia a la falta de originalidad de los autores. Cuando un ámbito es inteligente de por sí, más vale ir mejorándolo poco a poco, permanecer en él hasta exprimirlo, hasta encontrar toda su verdad. Eso es lo que me parece que Simone de Beauvoir llevó a cabo. Llevó el existencialismo al único ámbito en el que no se había adentrado: el de la mujer. Así, las mujeres pudieron verse identificadas, entenderse; el existencialismo ya no era cosa de hombres, sino de seres humanos.

Es maravillosa la capacidad que posee el ser humano para adquirir gustos e ideas (¡buenas!) de otras personas. ¿Dejamos de ser originales por ello? Una amiga me recomendó mucha música que marcó mi vida. Hasta hace poco, me planteaba si acaso no era yo un cúmulo de recomendaciones de personas cercanas, y no poseía una identidad propia. Pero, ¿podemos separarnos del exterior de manera completa? ¿podemos sacar de dentro algo completamente original, que no tenga nada que ver con nada de lo que hemos leído o escuchado? Somos seres contextuales y creo que es importante que no lo olvidemos, pero debemos saber qué aceptar del exterior y analizar siempre con criterio lo que el mundo nos ofrece, además de la perspectiva con la que miramos.